¿Por qué debemos dormir bien para perder peso?

La transformación del cuerpo, en este caso, el perder peso, es un proceso que requiere de muchos sacrificios y esfuerzos que al final de cuentas valen la pena totalmente. Para lograr este objetivo, hay que tener en cuenta todos los factores que influyen en la quema de grasas, por lo que conocerlos y aprovecharlos al máximo, propiciarán a una transformación más rápida y eficaz.

Recuerda que para perder grasa del cuerpo, no sólo basta con la práctica constante de ejercicio y someterse a una dieta balanceada, sino que además, hay que descansar adecuadamente para maximizar los resultados. Y es por eso que te vamos a dar 6 poderosas razones para dormir bien al momento de perder peso.

Al dormir poco se siente más hambre y si tiene menos energía

Al no dormir lo suficiente, el cuerpo produce una hormona que es conocida como grelina, la cuál es la causante del apetito. Esto se debe a que la falta de descanso propicie a la necesidad de una alimentación más regular con tal de elevar los niveles de energía en el cuerpo.

Además esa falta de energía provoca un menor rendimiento durante las sesiones de ejercicio y con ello, todos los puntos desfavorables que se desencadenan al realizar una mala práctica como una menor quema de calorías, menor ganancia de músculo, fuerza y resistencia, y el riesgo aumentado de sufrir lesiones.

Baja producción de leptina al dormir menos

La hormona de la saciedad, conocida como leptina se produce durante el descanso. Al no hacerlo adecuadamente, los niveles de esta disminuyen, que sumando a la falta de grelina, propician a comer más y más, llegando al eventual gane de peso.

Descansar menos requiere de más azúcar en el cuerpo

Debido a la falta de energía al no descansar correctamente, el cuerpo demandará una mayor cantidad de alimentos con azúcares y carbohidratos, que por su gran rapidez para convertirse en glucosa que viaja directamente a la sangre, se busca reestablecer los niveles de energía.

Aunque la glucosa suele ser una eficaz fuente de energía, es utilizada por el cuerpo de manera rápida, por lo que se requiere cada vez más y más debido a la falta de descanso.

Dormir poco reduce la tasa metabólica

Al no dormir al menos ocho horas al día se reduce el metabolismo como una reacción para preservar una mayor cantidad de energía en el cuerpo. Un estudio publicado en Canadá en el que dos grupos de personas sometidas a la misma dieta, pero descansando 8.5 y 5.5 horas, respectivamente, demostró que quienes dormían más, lograron una mayor pérdida de peso al finalizar el programa.

Ante la falta de descansa, el cuerpo busca la compensación energética, provocando la reducción de la tasa metabólica y por tanto, en la quema calórica al realizar actividades físicas y las actividades indispensables del cuerpo.

Los músculos no se desarrollan correctamente con la falta de descanso

Al realizar entrenamientos de fuerza, se producen microroturas en las fibras musculares que sólamente pueden repararse con un buen descanso; por lo que, al no tener la adecuada recuperación, los músculos no crecen los suficiente.

Una de las mejoras formas para perder peso es aumentando la masa muscular, ya que este tejido requiere de mayor energía para mantenerse en el cuerpo, ante la falta del mismo, la tasa metabólica se ve reducida considerablemente.

Se aumenta el riesgo de sufrir lesiones con la falta de sueño

Debido a la misma falta de descanso, y por tanto, de recuperación en las fibras musculares post-entrenamiento, estas se debilitan, aumentando las probabilidades sufrir lesiones en la siguiente sesión de ejercicios.