Con el paso de los años, la pérdida de grasa corporal es un concepto que se ha ido mitificando de mil y un maneras, propiciando a que la obesidad sea una enfermedad que se propaga cada vez más a miles y miles de personas, convirtiéndose en un tema de preocupación mundial que pese a los esfuerzos de la OMS, en conjunto con los gobiernos de los países que muestran un mayor índice de personas obesas (tales como México y Estados Unidos), no logren erradicarla o al menos combatirla de forma efectiva.
Sin embargo, ahí no acaba todo, y es que existe una enorme cantidad de razones que evitan que la obesidad desaparezca, y es justamente el tema que hoy queremos abordar con mayor profundidad, pues si nos ponemos a pensar un poco, los mitos que la rodean, son los principales culpables y por ello, en nuestras manos está compartir este tipo de información para que todas las campañas a favor de un cuerpo sano y esbelto tengan resultados positivos.
¿Por qué es tan difícil luchar contra la obesidad?
Para poder responder esta pregunta, vamos a analizar todos los aspectos que se involucran en este caótico padecimiento, que van desde una mala estructuración de la dieta, hasta la falta de actividad física, o en casos contados, debido a cuestiones biológicas que son más difíciles de controlar. Sin importar el caso, a la larga representa un déficit importante en la calidad de vida de las personas que lo sufren.
Factor 1: La obesidad a causa de una dieta desbalanceada
Sabemos que el cuerpo es una ‘máquina’ en cambios constantes y que para su correcto funcionamiento debe recibir una dosis diaria de energía y nutrientes a partir de los alimentos, que tras su digestión se convierten en calorías para poder ser usadas al momento de realizar cualquier actividad física o incluso estando en reposo. Seguramente habrás escuchado el término “metabolismo”, y es este el principal regulador de este complejo proceso.
Pero, ¿qué pasa cuando el metabolismo empieza a funcionar mal?. Vamos a plantear una analogía bastante común:
[note note_color=»#b5d4ff»]Imaginemos el ejemplo de un carro que para poder arrancar necesita de combustible, ya sea diesel, gasolina o electricidad. Al no contar con cualquiera de estos elementos, el auto permanece inmóvil, ¿cierto?. Lo mismo pasa con el cuerpo humano que requiere de energías (calorías) para hacer hasta las funciones más básicas como respirar o pensar; un cuerpo que no recibe calorías, tampoco será capaz de andar. Sin embargo, existe una principal diferencia entre el cuerpo humano y el carro, que consiste en que al recibir un exceso de combustible, al menos este último podrá eliminarla tan fácil, debido a que naturalmente, el tanque comienza a rebosar. Con el cuerpo humano sucede todo lo contrario, que ante el exceso de energías ingeridas, estas se almacenan en forma de grasa y es precisamente eso lo que ocasiona la obesidad. Al paso del tiempo, la acumulación de tejido adiposo repercute directamente en la tasa metabólica, volviéndola más lenta y propiciando a que más grasa sea acumulada, es un círculo vicioso que puede llegar a culminar en una situación mortal[/note]
En pocas palabras, si comes más de lo que debes, engordas.
Factor 2: Los malos hábitos alimenticios y lo difícil que es eliminarlos
Entre las principales razones por las que una persona es obesa, está la de tener malos hábitos alimenticios, y por diversas cuestiones, una persona llenita, claramente tiende a comer más, incluso entre comidas, pues experimentan una sensación de hambruna constante, causada por la secreción excesiva de una hormona llamada leptina y que con el paso del tiempo, provoca una reacción negativa en sus receptores, propiciando que se busquen ingerir más alimentos.
Vamos a ponerlo de otra forma para no causar tanta confusión: en un escenario normal, la producción de leptina ayuda que el cuerpo sepa cuándo dejar de comer para evitar la acumulación de grasas. Sin embargo, cuando el exceso de comida empieza a manifestarse de forma frecuente, el cuerpo desarrolla un mecanismo de defensa que consiste en la eventual producción de leptina en cantidades mayores, pero que poco a poco deja de ser suficiente como para indicar al cuerpo que ya es momento de terminar de comer. Este efecto suele conocerse como resistencia a la leptina y es precisamente el que causa que con los años, una persona aumente de tamaño en lugar de mantenerse o disminuir su peso.
Además, los malos hábitos alimenticios que se adquieren, cada vez son más difíciles de dejar a un lado evitando que también sea difícil seguir una dieta balanceada reducida en calorías.
Factor 3: El mal concepto de dieta
Una dieta es también conocida como el régimen alimenticio que una persona suele llevar, sin importar la condición de la misma. Dicho esto, podemos deducir fácilmente que existen dietas buenas y malas, y ahí está la principal razón por la que suele ser muy complicado “estar a dieta” para perder volumen.
Evidentemente, las dietas malas, basadas en el consumo de comida chatarra, refrescos embotellados, comidas fritas y todo aquello que resulta en el incremento considerable de calorías, hará que aumentes de talla. Por otra parte, una dieta balanceada, rica en proteínas, carbohidratos y grasas saludables, mucha agua y con las calorías controladas, propiciará a que mantengas tu peso o pierdas grasa, según su estructura.
Recuerda que “estar a dieta” no necesariamente significa tener que dejar de comer a tal punto de pasar hambre constante, si esto es así, es porque tu resistencia a la insulina se está haciendo presente (hay muchas maneras de combatir este efecto, como consumiendo alguna fruta o porción de verduras entre las principales comidas), o porque tu régimen alimenticio no es el adecuado. Si bien es cierto que para dejar de ser obeso es necesario reducir el número de calorías en la dieta, este déficit no suele ser tan alarmante, pues lo recomendable para no poner en riesgo la salud durante el proceso, es disminuir únicamente el consumo de alimentos en 500 calorías al día y que equivalen a un refresco individual, un pastelillo o una bolsa y poco más de frituras.
Siguiendo estas recomendaciones y dejando atrás esos malos conceptos que dicen que la dieta es mala, que mata de hambre o que sólo se pueden comer frutas y verduras, verás como tu índice de grasa corporal irá disminuyendo y tarde o temprano te convertirás en una persona saludable.
Factor 4: La genética o la biología
Sobre la cuestión de que la obesidad es un padecimiento que puede heredarse, no estamos seguros en su totalidad. Lo que sí es cierto es que hay aspectos biológicos que fomentan a la ganancia de grasa en una persona, tales como el síndrome de Cushing en el que cuerpo tiende a producir una mayor cantidad de la hormona cortisol, que se relaciona con la aparición del estrés, y por ende, el aumento del apetito constante.
Estas cuestiones médicas son mucho más complejas de analizar, así que no las vamos a platicar sobre ellas, en parte porque puede causar mucha información equívoca y es eso precisamente lo que no queremos. Si tienes dudas acerca de tu obesidad (en caso que la tengas) siendo causada una enfermedad, te recomendamos ampliamente consultar con el médico para que puedas recibir el tratamiento inmediato, sin importar el escenario del que se trate.
Factor 5: Las diferencias entre “perder peso” y “quemar grasas”
“Quiero bajar de peso”; “¿será que si hago dieta bajaré de peso?”; “doctor, quiero bajar de peso”. Son expresiones que solemos escuchar con bastante frecuencia y que en realidad abordan un concepto muy diferente al que se piensa.
¿Cuál es la diferencia entre perder peso y perder grasas?. Si nos ponemos un poco estrictos, en la física clásica el peso es la fuerza de gravedad que actúa sobre un cuerpo. Eso nos lo dice hasta la Wikipedia. Esto quiere decir que una persona que pesa 80 kg en la tierra, pesará 13 kg en la luna, por la sencilla razón que el satélite tiene una gravedad de 1.622 m/s2, y que sin embargo, a pesar de esta variación la masa sigue siendo la misma. Bien, quizás en este punto ya nos salimos un poco del tema principal, pero es necesario para poder continuar con la siguiente explicación,
Si sabemos que la masa es aquello que ocupa un lugar en el espacio, entonces la grasa, los músculos, huesos y otros tejidos del cuerpo son masa, o equívocamente referidos como peso, que el es concepto que usaremos a partir de ahora para referirnos a la masa. No es lo más óptimo, pero seguramente servirá para sacarnos de todas las dudas posibles.
El músculo como razón de peso
Entonces, con esta información, podemos deducir que una persona que pierde peso, no necesariamente dejará de ser obesa, pues dicha pérdida pudo haberse provocado por la degradación de la masa muscular, la eliminación de líquidos acumulados a través de la sudoración o incluso tras la extirpación de un órgano. Por el lado contrario, una persona que ha ganado peso, tampoco significa es obesa, necesariamente. Por ejemplo:}
[note note_color=»#b5d4ff»]Un sujeto va al gimnasio, entrena constantemente, come bien y descansa como debe ser, eventualmente aumentará su volumen muscular, y por ende su peso. Aquí está la principal diferencia, y sin embargo, aún siendo bastante fácil de diferenciar, no es información que todo el mundo conoce. En un caso así, aquél que realiza actividades de musculación y pesa 80 kg, claramente tendrá menos grasa corporal en comparación a otro que no entrena, pero tiene el mismo peso. Además, el sujeto con obesidad se verá de mayor tamaño porque el músculo es un tejido más denso y que por tanto ocupa menos espacio que la grasa.[/note]
La pérdida de peso a causa del ejercicio
Sabemos que para lidiar contra la obesidad además de seguir una dieta sana, también hay que realizar ejercicio constante, pero antes de ponerse manos a la obra hay que conocer algunos aspectos que sin duda marcarán la diferencia entre una campaña exitosa y otra que seguramente fracasará.
La pérdida de grasa, ya tomando el concepto ideal, está estrechamente relacionada con la actividad física que realiza una persona. La mayoría de ellas creen que el ejercicio cardiovascular (correr, nadar, andar, remar, etc) es el método definitivo para incentivar la quema de calorías, lo cual puede ser cierto pero desde un punto de vista específico. Y es que algo de lo que siempre nos gusta hablar es que el músculo es un tejido metabólicamente activo, o lo que es igual, que mientras más músculo tenga una persona, más calorías quemará aún estando en reposo.
Dicho esto no resulta complicado concluir que los entrenamientos para la ganancia de masa muscular, ya sea el crossfit, el culturismo o la calistenia, son lo más recomendable para eliminar las grasas acumuladas. Sin embargo, esto no hace que el cardio deje de ser bueno, pues aún lo es y de hecho se recomienda llevarlo a cabo luego de cada sesión de ejercicios de musculación, por lo menos, entre 3 y 4 veces a la seman semana, durante 20 minutos, para ganar una mayor resistencia y fortalecer el sistema circulatorio y cardiovascular. Puedes leer unos artículos que hemos preparado para ti para conocer todo acerca de este complejo proceso.
- Cardio vs pesas para bajar de peso
- El cardio después de las pesas para quemar grasas
- Todo lo que debes hacer sobre los ejercicios cardiovasculares
Así que ahora ya lo sabes, hay una diferencia fundamental entre perder peso y quemar grasas. Si ya te has decidido a seguir por el camino adecuado, no queda de otra más que ponerte las pilas, pues ya tienes todo el conocimiento básico necesario para que el proceso sea seguro y garantizado.
Usa testosterona para debajo de la lengua
HEY!
VOY DIARIO AL GYM Y LLEVO UNA DIETA DE ACUERDO A LO QUE HE APRENDIDO, LLEVO APROX 1 AÑO ENTRENANDO Y UNOS 5 MESES CON DISIPLINA DE DIETA, NO HE NOTADO GRANDES RESULTADOS EN LA ZONA ABDOMINAL, ME PODRIAN SUGERIR, QUE COMER, EJERCICIOS O QUE PUEDO HACER PARA REDUCIR Y TONIFICAR ESTA ZONA PORFAVOR? 🙂
Totalmente de acuerdo. 🙂
El problema está en el principio d todo, en la educación no estamos educados en llevar una dieta equilibrada y sana, es mas cuanto mas pequeños mas porqueria nos dan para merendar etc. Ahora en EEUU están haciendo eliminar las grasas trans de los alimentos procesados, un poco tarde no? Pero bueno ayudará a reducir el indice de obesidad q tienen alli. Algo es algo!! Y tambien creo que el concepto de dieta esta mal desarrollado, yo una dieta lo relaciono con una temporada de pasarlo mal, comer poco y a desgana y prohibirme cosas q me gustan y es te concepto lo tenemos muchos… pero no tiene por qué ser así, yo acudi a un nutricionista y jamas pense que pudiera “estar a dieta” el año entero y estar bien y al final es porque realmente no es una dieta es un cambio en la alimentacion, estoy con la dieta de la zona q s la q me recomendó y no paso hambre porque como 5 veces al dia pero no solo eso es que como de todo pescado, carne, frutas, verduras…. Y no solo adelgacé en su día es que me encuentro muy bien, descanso por las noches, tengo energia durante el dia, estoy mas en forma mentalmente etc etc han sido todo beneficios y si algun fin de semana me salto la dieta no pasa nada. Lo importante es comer saludable y equilibrado. Si buscais algo asi probad esa dieta xq es muy recomendable. Un saludo!