El Pole Dance, o también referido como baile de barra, baile del caño, barra americana y más popularmente como baile del tubo, es una disciplina que desde la década de los ochenta ha comenzado a ganar una gran popularidad dentro de la cultura pop, luego de que muchos clubes nocturnos y de strips comenzaran a integrarlo como parte de sus espectáculos para atraer la atención de más clientes, y eso sin mencionar que pronto, también se fue adueñando de la gran pantalla luego de que películas como Showgirl y Striptease de Elizabeth Berkley y Demi Moore, respectivamente, nos mostraran de manera abierta el lado seductor de esta práctica.
Debido a la misma naturaleza erótica de este baile que muestra sin titubear la más gratificante de la belleza femenina, se le empezó a considerar como una disciplina para las mujeres de la vida fácil.
Un poco de historia sobre el Pole dance
Si bien es cierto que el Pole dance cobró gran popularidad a mediados de la década de los ochenta, se cree que en realidad comenzó a mostrarse en Canadá durante la Gran Depresión. No obstante, la disciplina era muy diferente a como la conocemos hoy en día, pues en ella, además del trabajo con el piso y los giros alrededor de la barra, también se empleaban movimientos con diferentes figuras y en transiciones distintas. Para la década de los cincuenta comenzó a modificarse ligeramente, influenciándose del burlesque.
Por otra parte, hay quienes creen que el verdadero origen del Pole dance parte de los diferentes espectáculos y acrobacias que vemos comúnmente en los circos, por lo que no es una sorpresa relacionar muchas de las figuras que vemos en el Pole dance compartir cierta similaridad con acrobacias del circo chino.
El Pole dance como disciplina deportiva
A pesar de sus inicios y su progresiva evolución que le ha dado bastante mala fama, la era del liberalismo posó sus manos directamente sobre esta disciplina al punto de que hoy en día es considerada por muchos como un deporte en toda la regla, mientras que para otros tantos representa una forma de expresar un verdadero arte a través del cuerpo.
Y es que el Pole Dance, a pesar de parecer un baile bastante sencillo, lo cierto es que no lo es, pues su práctica está precedida de un dominio completo del peso corporal, así como el desarrollo de todos los grupos musculares y una increíble flexibilidad para poder realizar todo tipo de movimientos sin complicaciones. No es por nada que las mujeres que practican el Pole dance, ya sea como una mera forma de mantenerse en forma, o bien, de manera profesional, practican otras disciplinas como el ballet, yoga, la gimnasia rítmica y las acrobacias aéreas.
Y no, contrario a lo que muchos creen, el Pole dance ya no es un “simple” baile erótico con el fin de entretener a hombres solteros y fiesteros luego de una cansada jornada de trabajo, pues actualmente existen miles de academias y centros fitness que han incorporado la enseñanza del Pole dance a su repertorio con el fin de que muchas mujeres puedan realizar algún tipo de actividad física para gozar de una salud excelente y cuerpo envidiable, de una manera sana y divertida. Tanto es así, que muchas mujeres profesionistas, mamás, estudiantes o de cualquier índole, practican el Pole dance para alejarse del estrés del día a día.
Y eso es tan sólo una parte que nos muestra que esta disciplina va mucho más allá, pues el Pole Dance cuenta con una federación internacional conocida como la IPSF (international Pole Sport Federation) y la WPDF (World Pole Dance Federation) que no sólo regulan las competencias deportivas llevadas a cabo en diferentes países, sino que también han realizado diversas propuestas al Comité Olímpico para integrar esta disciplina dentro de las Olimpiadas que se celebran cada cuatro años.
El video de arriba nos muestra la presentación de Oona Kivelä, ganadora del Pole Art 2012, que a su vez ha sido tres veces campeona mundial de la disciplina. Tal y como puedes apreciar, el Pole dance a nivel deportivo es sumamente diferente a lo que esperaríamos encontrar en un cabaret o club nocturno.
Beneficios del Pole dance
A simple vista, podemos encontrar una amplia gama de beneficios que se presentan tras la práctica constante del pole dance. El primero y quizás el mayor motivo por el que muchas personas lo practican (al menos en un principio, pues conforme pasa el tiempo, la mentalidad va cambiando), es debido a la quema de calorías que se logran. En promedio, una clase de 90 minutos puede suponer un desgaste energético de entre 500 y 600 calorías, lo que estimula de forma sorprendente la quema de grasas y con ello, se comienza a construir el camino necesario para llegar a tener un cuerpo más estético y sobre todo, saludable.
Pero eso no lo es todo, pues como ya lo hemos mencionado en diferentes artículos, no es la quema de calorías lo único que importa a la hora de practicar cualquier disciplina deportiva. En el caso del Pole dance, podemos encontrar otros beneficios que seguramente te van interesar mucho más. Uno de ellos es la ganancia de masa muscular, que te permitirá tener un mejor dominio sobre tu propio cuerpo para poder tener una sinergia mucho más estrecha con la barra. En concreto, se trabajan con mayor enfoque los bíceps y tríceps, la espalda, el abdomen y los oblicuos. Como puedes darte cuenta, el gimnasio no es el único lugar en el que trabajarás esa musculatura para mejorar tu tasa metabólica, hay opciones mucho más divertidas y menos riesgosas como lo es el Pole dance, pues al no tener que trabajar con cargas muy pesadas, sino sólo con tu propio cuerpo, podrás estar seguro o segura que las lesiones son un tema de menor preocupación, aunque claro, siempre es recomendable apegarse a las técnicas de ejecución lo mejor posible e iniciar con una buena fase de calentamiento para que los músculos estén preparados de cara al trabajo que está por venir.
Por otra parte, también se fortalece la flexibilidad, una capacidad que no muchos logran desarrollar debido a lo difícil y casi insufrible que resulta realizar los diferentes ejercicios para este objetivo. Esta es quizás una de las principales razones por las que la mayoría de personas que practican el Pole dance, ya sea de forma deportiva o con fines de entretenimiento, tienen cierta experiencia adquirida a través de otros prácticas (yoga, ballet, gimnasia, etc.). No obstante, si eres una persona que jamás ha realizado algún tipo de deporte y te interesa practicar el Pole dance, puedes hacerlo sin ningún tipo de problema, pues el proceso de aprendizaje es un camino por el que muchos deben pasar, así que sobre todo en este caso, no hay lugar para los complejos que se pueden llegar a tener a la hora de situarse junto a la barra. Una de las grandes ventajas del Pole dance es su versatilidad y accesibilidad incluso para los más principiantes.
Gracias a ello, verás cómo con el tiempo tu autoestima se va por los aires, no sólo por las endorfinas y otras hormonas que se liberan al hacer ejercicio, sino también por los resultados que se consiguen a nivel progresión de la práctica y a los cambios que se presentan en el cuerpo, tanto estéticos como de salud. Si tu plan es perder esos kilos de más que has ganado con el paso del tiempo, es muy probable que con el Pole dance vas a conseguirlo y en menos tiempo del que te podrías imaginar.
Ten por seguro que si llegas a practicarlo de manera impecable, podrás dominar cualquier disciplina, pues a medida que se mejora la masa muscular, también aumentan los niveles de fuerza y la resistencia física, permitiendo al cuerpo realizar todo tipo de actividad intensa sin sufrir un desgaste energético significativo.
Otros datos curiosos que debes saber acerca del Pole dance
Como en todas las disciplinas fitness que nos podemos encontrar a día de hoy, existen diferentes datos curiosos y mitos que rodean el Pole dance y que a continuación te contaremos para que, si te has decido a practicarlo, puedas tener una mayor seguridad en tu primer día de clases.
- En primer lugar, actualmente el nombre del Pole dance suele ser considerado como algo cutre, pues muchas personas se refieren a él como pole fitnss o pole sport, que tal y como ya hemos mencionado en diferentes ocasiones, es la disciplina o el ámbito deportivo que busca desarrollar las capacidades del cuerpo a un nivel mucho mayor, realizando ejercicios que mejoran la masa muscular, fuerza, flexibilidad, el autoestima y la figura.
- A pesar de que a nivel amatéur (pues en el ámbito profesional no suele ser muy común) aún subsisten ciertas tendencias eróticas en la práctica del deporte, lo cierto, es que cada vez se le considera como un arte.
- El pole dance es una disciplina que pueden practicar tanto hombres como mujeres, aunque claro, la tendencia se inclina más por el ámbito femenino, quizás por los orígenes del mismo, o también porque la barra puede soportar un peso máximo de 80 kilogramos.
- Hay un mito bastante popular que gira en torno al Pole dance y ese es el que deja mucho qué hablar acerca de por qué todavía no tiene la aceptación que debería. Y es que muchas personas ajenas a la disciplina creen que la práctica requiere de un cuerpo esbelto y tonificado con más brillantina que ropa cuando pasa totalmente lo contrario. Es cierto que se recomienda no utilizar demasiada ropa para permitir que la piel pueda adherirse a la barra, pero no habrá ningún problema si acudes con la típica ropa del gimnasio o de cualquier otra clase como lo puede ser el yoga.
- Si eres una persona que padece de sobrepeso y tienes miedo a lo que puedas ver frente al espejo (pues en cada salón existen enormes espejos sobre la pared, tal como ocurre con el ballet), no te preocupes, recuerda que muchas personas más iniciaron en condiciones similares y hoy en día se han convertido en verdaderos exponentes del baile en barra.
- Para practicar Pole dance sólo necesitas de un par de requisitos: dejar todos los complejos atrás, tener mucha disciplina y sobre todo, divertirte en cada momento.
En conclusión
Quizás ya hayas llegado a la misma conclusión, pero no está demás decirla. El pole dance es una practica que se va expandiendo cada vez más alrededor del mundo y su aceptación es bastante buena… quien sabe, a lo mejor y para las próximas Olimpiadas del 2020 podamos ver a diversas figuras de la disciplina presentar sus mejores espectáculos para demostrar el gran esfuerzo y trabajo requerido para su dominio.
Como puedes ver, el Pole dance es una excelente forma de poner el cuerpo a trabajar, así que no dudes en añadirlo a tu lista de posibles deportes que puedes practicar si es que el gimnasio o salir a correr por las mañanas no te parece interesante.
Eso sí, recuerda que más allá de la preparación física, lo más importante que necesitas para empezar en el Pole dance es una buena actitud que te lleve a dar lo mejor di en las clases al mismo tiempo que te diviertes como en muy pocas ocasiones lo haces. Actualmente existen muchos gimnasios o incluso academias de baile que han integrado la disciplina a su catálogo de enseñanza así que es cuestión de ti encontrar el establecimiento que mejor creas conveniente.
Olvídate de todos esos complejos que puedas llegar a tener, pues el Pole dance es una práctica bastante amigable para los principiantes y si no puedes realizar los movimientos o incluso sostenerte en la barra, seguramente tu maestro o maestra te ayudarán a progresar paulatinamente con rutinas que puedes realizar en el piso, así que las excusas están demás.
Yo amo el pole dance y todo es verdad