Aunque nadie suele hablar de ello, lo cierto es que las manchas en las axilas son más comunes de lo que muchas personas creen y tienen su origen en diversos factores como lo pueden ser la transpiración excesiva, el uso de ropa ajustada, la constante aplicaciones de desodorantes o antitranspirantes que dañan la piel e incluso por una mala higiene.
Si bien no se ha encontrado una relación directa en estas manchas con alguna enfermedad, hay que tener en cuenta que sí se trata de un problema meramente estético, por lo que a nivel social no es bien visto, dejando mucho de qué hablar de las personas que padecen de ello. No obstante, existen remedios que suponen un gran alivio ya que permiten eliminar las manchas en las axilas de forma natural y sin tener que hacer grandes desembolsos de dinero en tratamientos médicos.
El sobrepeso o la obesidad como factor para la generación de axilas oscuras
No muchos lo saben, pero el sobrepeso y la obesidad tienen una estrecha relación con muchos de los problemas más comunes de la piel, especialmente en los pliegues como el cuello, las axilas, rodillas, etc. Algunas de las causas más conocidas es por la resistencia del cuerpo hacia la insulina, que se ve reflejada en la aparición de manchas oscuras que dan el aspecto de suciedad en regiones como el cuello.
Pero ese no es el único problema, pues las personas que sufren de estas condiciones también desarrollan una mayor sensibilidad en la piel, volviéndose más propensos a contraer infecciones e irritaciones en las zonas afectadas.
Aquellos que padecen diabetes deben tener un control mucho más estricto cuando se presentan estas situaciones, ya que los tratamientos curativos suelen ser mucho más complejos, de manera que la cicatrización pueda llevarse a cabo satisfactoriamente.
Cómo prevenir las manchas oscuras en las axilas
Además de las condiciones de salud ya mencionadas más arriba, existen ciertas recomendaciones que pueden tenerse en cuenta para prevenir la aparición de manchas en las axilas. Como bien dicen por ahí, más vale prevenir que curar.
- Evitar el constante afeitado de las axilas: El afeitado de las axilas y de la piel en general causa una notable irritación, lo que a su vez ocasiona la aparición de las manchas oscuras.
- Las cremas para depilar y otros productos relacionados también causan irritación, especialmente cuando se usan de forma frecuente.
- Con el fin de evitar las manchas en las axilas, es más recomendable optar por un rasurado con cera, ya que de esta forma sí se logra arrancar el vello de raíz, de manera que al paso de las horas las manchas ya no se harán visibles.
- Quizás pueda resultar doloroso, pero lo cierto es que luego de un par de sesiones el cuerpo desarrolla cierta resistencia ante las sensaciones.
- Tal y como se advierte al inicio del artículo, la higiene es fundamental para mantener una piel sana. Esto es así porque con ello se logran retirar las células muertas que la piel desprende cada día.
- El uso de desodorantes con mucho químicos también representa un problema común tanto para las axilas como para la ropa, que suele sufrir la aparición de manchas amarillas.
- La transpiración también tiene mucho qué ver con las manchas oscuras, por lo que se debe evitar el uso de ropa muy ajustado o abrigarse en exceso para permitir al cuerpo respirar adecuadamente.
- Siempre que sea posible es recomendable exfoliarse la piel, desde la cara hasta el cuello, así como los pliegues en donde suele acumularse una mayor cantidad de células muertas.
Siempre y cuando el problema de las manchas en las axilas no sea provocado por alguna condición médica, se puede proceder a utilizar cualquiera de los métodos mencionados a continuación que han demostrado su efectividad a lo largo de los años.
1.- Blanquear las axilas con limón
El limón es un fruto que aporta una serie de propiedades benéficas para el cuerpo. Sabemos que tiene un alto contenido en Vitamina C, por lo que actúa como un eficaz antioxidante que mejora el estado de salud del organismo en general, incluyendo la piel.
Al mismo tiempo tiene una función exfoliante debido a su acidez que por si fuera poco, también lo vuelve un excelente agente anti-biológico que es capaz de arrasar con las bacterias que causan el mal olor.
Sin embargo, antes de aplicarlo se deben tener en cuenta algunos aspectos para no dañar la piel expuesta, ya que por la acidez misma, también puede causar irritación y otros efectos perjudiciales.
- Una de las formas más comunes de aplicación es frotar directamente una rodaja de limón en cada axila mediante pequeños masajes circulares a lo largo de cinco minutos. Como recomendación es necesario tomar una ducha inmediatamente después de haber finalizado, así como aplicarse alguna crema hidratante (nunca desodorantes) para evitar la resequedad de la piel.
- Una forma menos agresiva consiste en mezclar tres cucharadas de yogur natural con el jugo de medio limón y una cucharada de miel. A continuación, revolver muy bien hasta obtener una mezcla homogénea y aplicar directamente sobre las axilas durante diez minutos. Retirar la mezcla con agua tibia.
- También se puede realizar una mezcla de dos cucharadas de azúcar con unas cuantas gotas de jugo de limón, de manera que el azúcar quede más blanda y húmeda (más no mojada). De preferencia utilizar azúcar morena y una vez se haya realizado la combinación, aplicar con la ayuda de las manos mediante suaves masajes. Dejar reposar por alrededor de diez minutos y enjuagar con agua tibia. Este método es ideal para las personas que sufren de piel oscura por afeitarse.
- Como última opción, se puede hacer uso de una pasta de nueces con limón y miel. En este caso, el yogur natural se sustituye por las nueces molidas, revolviendo todos los ingredientes hasta obtener una mezcla homogénea. El efecto sigue siendo el mismo, así como la forma y tiempo de aplicación.
Para cualquiera de los casos, los resultados empiezan a notarse a partir de la primera semana. Es importante no aplicar más de dos o tres veces cada semana para no ocasionar efectos adversos.
2. Blanquear las axilas con bicarbonato
El bicarbonato es otro compuesto que actúa como excelente agente antibiológico que es capaz de eliminar las bacterias que ocasionan el mal olor en las axilas, por lo que también se le considera como una alternativa más económica a los desodorantes.
De la misma forma, tiene propiedades exfoliantes que propician a reducir las células muertas de la piel, liberando las glándulas sudoríparas para tener una mejor oxigenación y evitar la acumulación de más bacterias.
- El método de aplicación consiste en formar una pasta hecha de bicarbonato de sodio y agua, mezclando una cucharada sopera en una taza del líquido. Posteriormente, aplicar mediante pequeños masajes circulares, dejando reposar por diez minutos. Para finalizar, enjuagar con agua tibia y secarse con un paño seco y suave para no dañar la piel.
El bicarbonato, al poder usarse como un desodorante, evitará continuar con la aplicación de estos últimos, previniendo la irritabilidad y las manchas oscuras ocasionadas por los químicos.
3. Blanquear las axilas con pepino
El pepino es un fruto milagroso, entre sus principales propiedades podemos encontrar su alto contenido en fibra y bajo valor calórico que en conjunto, ayudan a adelgazar de forma rápida y natural. Pero ya centrándose en el problema principal, cuenta con Vitamina E, que es excelente para tratar casi cualquier déficit relacionado con la piel como las manchas en las axilas. No en vano, es que se utiliza en todos los salones de belleza para reducir las bolsas de los ojos.
- Para este método se requiere de un pepino sin cáscara y cortado en cubos pequeños. A continuación, los cubos se deben triturar en la licuadora hasta obtener la consistencia espesa de una pasta. En seguida, lavarse las axilas con agua fría para abrir los poros y aplicar con la ayuda de un algodón. Dejar reposar por 15 minutos y después enjuagar con agua tibia. ¡Voilá!
- Un método más complejo y al mismo tiempo efectivo, consiste en usar limón, pepino y cúrcuma. Basta con mezclar el jugo del cítrico con el jugo recién extraído de un pepino y una cucharada de cúrcuma. Una vez se obtenga una combinación homogénea, aplicar con la ayuda de un algodón y las axilas limpias por alrededor de 5 minutos. Enjuagar con agua tibia y secar con una toalla suave.
- En caso de no contar con el tiempo suficiente, también se puede aplicar directamente una rodaja de pepino sobre las axilas e incluso dejar toda la noche para prolongar su efecto.
La ventaja de este remedio es que no es para nada agresivo y se puede usar todos los días hasta que las manchas hayan desaparecido.
4. Blanquear las axilas con patatas
Las patatas también son recomendadas para aclarar la piel, incluyendo en los pliegues como las axilas. Aunque no es tan buena como el limón, lo cierto es que no resulta para nada irritante, convirtiéndose así en una verdadera alternativa para las personas que sienten molestas al hacer uso del cítrico.
- La forma más fácil de usar es cortando una rodaja gruesa de patata, aplicando directamente sobre las axilas por aproximadamente diez minutos. Al finalizar, enjuagar con agua tibia.
- Si se desea, y para mejores resultados, puedes usar el jugo de las patatas, con la ayuda de un extractor para su obtención. A continuación, se aplica el jugo en la piel manchada con la ayuda de un algodón, dando pequeños masajes por el mismo tiempo. Es importante limpiarse con agua tibia al haber finalizado para tirar las células muertas.
5. Blanquear las axilas con azafrán
Sin duda un método efectivo, pero también costoso debido al precio con el que el azafrán se consigue. No obstante si se le quiere dar un intento, habrá que hacer lo siguiente.
- Mezclar unas cuantas hebras de azafrán en una tasa de leche hasta obtener una combinación homogénea. Después, aplicar directamente sobre las axilas con pequeños masajes, utilizando un algodón y dejando reposar toda la noche para mejorar los resultados.
- Si se desea también se puede aplicar durante 20 minutos para luego retirar con agua tibia.
6. Blanquear las axilas con esencia de aceites
Los aceites son utilizados en problemas de la piel como potentes hidratantes, aunque también funcionan como exfoliantes para liberarse de todas las impurezas. Existen diferentes métodos que pueden usarse y que a continuación se mencionan.
- La primera receta se hace a base de dos cucharadas de aceite de oliva y una taza de azúcar morena. Se combinan ambos elementos en la taza hasta que se haya obtenido una pasta sin grumos. Después, se aplica directamente con la ayuda de un algodón o las manos completamente limpias, dejando actuar por cinco minutos. Limpiar con agua tibia. Es importante hacer uso de ello sólo dos veces por semana, asegurándose de limpiar adecuadamente para evitar manchar la ropa.
- El aceite de coco también es excelente para la tarea, ya que tiene un alto contenido de vitamina E. Se aplica directamente sobre la piel y no requiere de combinaciones con otros ingredientes. Como ventaja adicional, también funciona como desodorante ya que tiene un fresco aroma que lo caracteriza.
- En algunas tiendas naturistas se puede conseguir el Aceite de Vitamina E puro. Se aplica de la misma forma que el resto y tiene un impacto tanto a nivel visual como salubre, ya que deja la piel más tersa. Quizás uno de los inconvenientes es que esta solución no es tan asequible como las dos primeras.
- Por último, la cuarta opción consiste en mezclar aceite de oliva, aceite de trigo, aceite de jojoba, aceite de frutas cítricas (todos los aceites deben estar en la misma cantidad, por ejemplo, cinco gotas) y agua. Al hacer esto se obtiene un potente blanqueador que debe usarse cuando mucho dos veces al día, preferentemente antes de cada baño y con las axilas limpias.
7. Blanquear las axilas con hierbas
Este blanqueador incluye ingredientes naturales obtenidos a través de diferentes hierbas. Son bastante fáciles de realizar y se pueden conseguir en tiendas naturistas a precios accesibles.
- Para ello es necesario contar con extracto de raíz de regaliz, extracto de aspen y extracto de frambuesa (todos en cantidades iguales). Se revuelven muy bien en un recipiente de cristal y se aplican sobre las zonas afectadas por alrededor de 30 minutos. Posteriormente se debe enjuagar muy bien con agua fría para evitar que se manche la ropa. Teniendo esto en cuenta, es preferible utilizar antes de la ducha. El tratamiento consiste en aplicar todos los días las dos primeras semanas; pasado este período, las dosis cambian a un máximo de dos veces por semana hasta que las manchas desaparezcan por completo.
Una vez acabado, se puede almacenar la mezcla en un recipiente limpio y bien tapado dentro del refrigerador.
8. Blanquear las axilas con cáscaras de naranja
Este método ha demostrado su eficacia gracias a que la cáscara de naranja no sólo elimina las manchas en las axilas, sino que además funciona como un poderoso exfoliante capaz de retirar las células muertas de la piel y combatir las bacterias que causan el mal olor.
- Para este procedimiento se empieza dejando las cáscaras de naranja a la sombra para secarlas. Esto puede demorar desde unas horas hasta un día. Una vez estén completamente deshidratadas, se procede a cortarlas en pequeños cuadros y posteriormente se mezclan en diminutas cantidades leche y agua de rosas de manera que se pueda formar una pasta homogénea. A continuación se aplica sobre las axilas limpias y se deja reposar por 10 minutos. Al finalizar este tiempo se retira la pasta con agua tibia y se seca con una toalla suave.
Debido a su aroma natural, la esencia de la naranja puede perdurar hasta por varias horas.
Y en cuestión. Del aceite de coco cuanto tiempo se deja reposar
dejarlo actuar durante 15-30 minutos antes de lavarlo con un limpiador suave.