John Glaude se transformó de la manera adecuada, la manera en la que recomendamos a nuestros lectores cambiar: lenta y constantemente. Él no asistió a algún reality show, vio cómo algún hombre lo menospreciaba, se decaía y se dejaba expuesto al público. John cambió su dieta y se comprometió al entrenamiento regular. Y como recompensa, perdió casi 80 kilos, consiguiendo una transformación de cuerpo, mente y vida verdaderamente drástica.
El proceso, que Glaude detalló comenzando en 2014 mediante su canal de YouTube y cuenta de Instagram, llamado “Obese to Beast” (de obeso a bestia), le consiguió miles de seguidores y fans. Pero lo que finalmente lo hizo famoso fue un vídeo que subió en noviembre de 2014, visto casi 8 millones de veces. Si no lo has visto, el vídeo muestra su perspectiva a una de las inseguridades más grandes que se puede tener cuando se tiene tanto peso: la piel floja o suelta.
Pero este joven, de 22 años y que tuvo la oportunidad de hacerse conocido en el show de Ellen DeGeneres (quién incluso le regaló un Ford Mustang rojo), sigue con el camino de la humildad y el trabajo duro ya que mantiene su empleo de barista y nos ha dado un poco de su perspectiva de vida, esa que le permitió cambiar por completo su historia y que puede servir de motivación para muchos que quieren un cambio real no sólo en su físico sino en su forma de vivir.
¿Por qué decidió ponerse en forma?
Tenía 20 años y llevaba fuera del secundario ya dos años, pesando más de 160 kilos. Lo único que hacía para salir de su casa era ir al trabajo y volvía para ver televisión. Eso era todo lo que hacía, y lo odiaba. No se sentaba a ser gordito y feliz, realmente odiaba eso.
Y hay muchas personas en esa posición, donde él estaba. No pensaba que podía cambiar, no creía que había algo para hacer. Había noches donde lloraba hasta quedarse dormido porque sabía que se estaba matando cada vez que comía, y eso asustaba.
Obviamente quería cambiar para salvar su propia vida, pero el “clic” que hizo fue por algo bastante simple. Estaba viendo “Miami Ink” en Netflix, y apareció un muchacho que había perdido mucho peso. Le preguntaron cómo lo había hecho y predicó básicamente lo que predica John hoy en día: tomas el tema entre tus manos. Aprendes sobre nutrición y ejecutas lo que has aprendido. Después, vas al gimnasio y trabajas hasta que te duela.
En ese momento se dio cuenta de lo que se estaba haciendo a él mismo, y que la única persona capaz de cambiarlo sería él. La única persona que podría impedirle cambiar también sería él. Se dio cuenta de que necesitaba hacer esto para cambiarse o de lo contrario iba a morir a los 35 años con 200 kilos. Estaba asustado, pero se decía a sí mismo: “debo intentar lo máximo de mí porque no tengo nada más.”
Ya había intentado en el pasado y fallado, ¿qué fue lo diferente esta vez?
John, como muchos de nosotros, había intentado previamente cambiar su vida, ir al gimnasio y comer sano, pero cayó en la pereza o en las tentaciones. Y si bien no puede explicar el momento exactamente (lo que pasó dentro de él), hubo un “clic” que lo transformó. Supo desde ese momento que no iba a volver atrás, iba a transformarse. Iba a trabajar.
Desde entonces, todo ha sido cuesta arriba y fue una batalla con muchísimas complicaciones. Pero ahora lo ve como algo normal, que siempre van a haber momentos buenos y malos, siendo lo verdaderamente importante saber sobreponerse a las complicaciones que surgen.
Y Glaude no contrató un entrenador personal para transformarse, lo hizo todo por su cuenta. No porque esté en contra de los personal trainer sino que estos cuestan un buen dinero y él no tenía demasiado. Siempre recomienda a la gente contratar uno si tienen el dinero porque es una buena inversión, pero si no tienen el dinero no es el fin del mundo, uno es capaz de transformarse por su propia cuenta si aplica esfuerzo, dedicación y mucho amor por uno mismo.
¿En qué momento decidió hacer su transformación pública?
Al principio no compartía mucho acerca de su pérdida de peso. Se sentía, al comienzo, que estaba haciendo algo para él. Sus amigos le decían que los motivaba con sus metas de fitness, y esto le hizo darse cuenta de que podría ayudar a personas que no conocía. En ese momento decidió hacer su transformación pública.
Estaba compartiendo muchas cosas sobre ponerse en forma en su cuenta personal de Instagram, pero sabía que no todos sus amigos estaban metidos en el tema, y probablemente no querían ver todo lo que publicaba, por lo que abrió una cuenta nueva. Obviamente quería ayudar a las personas, pero quería también tener las cosas separadas.
Lo gracioso es que Obese to Beast básicamente acaparó todo, ya no tiene una cuenta Instagram separada. Se dio cuenta de que podía ayudar a gente que quizás nunca conocería y quería ver cómo iba eso. Nunca esperó que tenga el éxito que tiene ahora, pero está contento con eso.
Ya que tiene sólo 22 años, ¿Qué planea hacer con su vida?
Su plan está en hacer algo relacionado al fitness y en ayudar a las personas a alcanzar sus objetivos. El canal de YouTube es bastante lucrativo, y hay definitivamente maneras que puede utilizar para ayudar a todavía más personas. Podría hacer coaching online, por ejemplo.
Más que nada, la motivación de John David Glaude pasa en la gente que le dice que los motivó. Esto es algo que no puede explicar, el motivar a las personas lo motiva a él, y es algo sensacional.
Esta es la historia de motivación de John David Glaude, un joven que pesaba casi 165 kilos y que en menos de dos años ha conseguido transformar su físico, su mente y su vida por completo, demostrando lo que somos capaces de hacer cuando decidimos ponernos en forma y trabajar lo máximo que podemos por ello. La única persona capaz de cambiar tu vida eres tú mismo, y recuerda que eres también el único capaz de impedirlo, así que tú eliges si mejorar o dejarte llevar por la comodidad.
Echale un ojo a su video:
Ya había visto este video, y después de el han aparecido muchos que también han sufrido un proceso parecido.
Lo que me gustaría saber es que pasa después. Si toda esa piel es capaz de recuperar un aspecto más estético.
Saludos!