Cuando se habla de perder peso, siempre suelen surgir aberrantes frases como “para bajar, debo dejar de comer”, “si no como, bajo más rápido”, y la verdad es que desde mi punto de vista personal, me impresiona como es que a día de hoy, donde la información es libre y está al alcance de cualquiera gracias al poder del internet, todavía existe gente que se aferra a las erradas y peligrosas oraciones que acompañaron a nuestros padres durante su juventud.
¿Qué significa esto?. que sin saberlo, son muchas las personas que se disponen a perder esos kilos de más, pero que para su mala información, se ven obligados a recurrir a dietas milagro que no son más que “planes de alimentación” en los que se reducen drásticamente las calorías, siendo que el número y cantidad de comidas a ingerir durante el día casi casi tienden a desaparecer. Y si bien estas dietas pueden mostrar resultados favorecedores a simple vista, hay que entender que se pone en riesgo la salud al limitar el consumo de nutrientes, además de que existe una alta probabilidad de que el peso perdido no sea grasa, sino masa muscular, que ocasionará que una vez la persona que haya practicado dicha dieta, regrese a sus hábitos regulares, recuperará todo ese peso y probablemente, aún más.
Las reglas básicas para una dieta saludable
¿Qué hay que hacer ante este tipo de situaciones?, pues es simple, lo más sensato es informarse, conociendo al pie de las letra, aunque sea las reglas básicas que toda dieta saludable debe seguir:
- Comer, comer, comer: recuerda que el cuerpo necesita nutrientes para funcionar adecuadamente, y estos son obtenidos mediante la ingesta de alimentos. Esto quiere decir que debes comer sin importar si deseas bajar de peso; aquí la clave es hacerlo con conciencia y limitarse a consumir alimentos saludables como frutas, verduras, cereales integrales, fibras, proteínas, etc.
- Distribuir la comida adecuadamente: Ya sea que requieras 1500 o 2500 calorías al día, aquí lo importante es distribuir esa cantidad a lo largo de 24 horas para no pasar hambre, con esto se evitan los antojos y el posible consumo de comida chatarra.
- Consume carbohidratos, especialmente en la mañana: Mucha gente también tiene la mala información de que los carbohidratos deben evitarse al momento de someterse a una dieta para bajar de peso. En parte, esta afirmación puede estar en lo cierto, ya que si bien los carbohidratos simples son malos para el organismo debido a la cantidad de glucosa que generan, hay que tener en cuenta que también existe el grupo de carbohidratos complejos que ayudan al cuerpo a obtener esa energía necesaria para las actividades del día.
- Di no a dulces, refrescos, alcohol: Este tipo de alimentos, en especial los dulces y refrescos embotellados, suelen estar acompañados de grandes cantidades de azúcar, y por tanto, de muchas calorías, así que lo mejor es evitarlos.
- Disminuye el consumo de grasas: Hay una gran diferencia entre grasas y carbohidratos, pero lo curioso es que las grasas también se dividen en grupos que debes conocer. En este caso, se recomienda la disminución del consumo de grasas saturadas, y optar por la ingesta de grasas monoinsaturadas que aportan ácidos esenciales Omega 3, 6 y 9, y que pueden encontrarse en el aguacate, el aceite de oliva, algunos frutos secos, etc.
- Beber agua: Y por último, no olvides descuidar la hidratación de tu cuerpo. No hay un número de vasos predeterminado, ni cantidad establecida, sino simplemente beber cuando el cuerpo lo necesita.
Apasiónate por la actividad física
Pero recuerda que en todo proceso de transformación, el ejercicio tendrá un impacto bastante fuerte, así que en ningún momento debes olvidarte de practicar algún tipo de deporte.
Entre los principales beneficios del ejercicio, están:
- Aumento de la resistencia
- Mayor control del apetito
- Aumento en la tasa metabólica y por tanto el consumo calórico
- Reduce los riesgos de padecer enfermedades relacionadas con la obesidad
- Libera el estrés y nos hace sentir más felices y estar bien consigo mismo.
Ten en cuenta que no necesariamente debes acudir a un gimnasio o centro deportivo, basta con salir a caminar o correr, o realizar algunos ejercicios en casa con la ayuda de nuestro propio peso corporal.
¿Tienes alguna duda o comentario? Expertos lo responderán en las próximas 24 horas.