Siempre lo decimos, nuestra filosofía de un cuerpo ideal no es un cuerpo perfecto sino uno que está sano y con el que estás content@ y feliz. Así que para mantener tu motivación alta hoy queremos darte un panorama de cinco aspectos con los que puedes lograr ese cuerpo ideal que estás persiguiendo.
1. La realidad: no existen los atajos
Las personas en excelente forma física como los competidores, los modelos, los atletas profesionales no nacieron así. Puede que algunos sean genéticamente dotados pero a nadie le han regalado el cuerpo con buenos músculos, bajos niveles de grasa corporal y capacidad aeróbica máxima. Eso se lo han ganado entrenando, esforzándose, comiendo bien y haciendo las cosas como corresponde. Algunos piensan que tener un cuerpo en forma simplemente sucede; no se dan cuenta del trabajo que hay que poner en ello. No hay sacretos ni trucos mágicos, ni mucho menos atajos para obtener el cuerpo que estás buscando. Ejercicio, constancia y comer sano es lo que siempre ha funcionado.
2. No tienes que romperte el alma entrenando
Si, hay que entrenar de manera intensa y mantener el desafío con tu rutina de ejercicios para obtener resultados, pero no hay que mudarse al gimnasio para ello ni tampoco pasarse horas y horas a puro sudor, sangre y lagrimas. Hay una regla para ponerte en forma que si dominas lograrás mucho en tu cuerpo: tus resultados provendrán de esta proporción, 20% de ejercicio y 80% de una buena alimentación. Si aprendes a comer la rutina no tiene que ser de rigor militar. Todavía tendrás que entrenar duro, pero con 30, 45 minutos, una hora todos los días alcanza y sobra. No tienes que convertirte en un atleta que va a Londres para perder diez kilos, no tiene por qué ser doloroso…
[adsensenegro] 3. Al fuego héchale combustible
Lo que ayudará a tus ganas y a tu motivación para cambiar tu cuerpo será un objetivo. Sin una meta clara, específica, que tenga una fecha nada puede ser logrado. Ponte objetivos, pero ponte objetivos realistas, desafiantes y al mismo tiempo que puedas lograr así no te abruma lograr algo monumental. Puedes buscar cambios radicales, contamos en este blog con testimonios de personas que lograron bajar más de 50 kilos, transformaciones tremendas, pero eso debe hacerse de acuerdo a un plan, a un objetivo trazado, con metas de corto plazo y una gran meta de largo plazo. Nadie se vuelve magro de la noche a la mañana, ni tampoco lo logra sin un plan trazado ni una estrategia.
4. La paciencia y la constancia SIEMPRE pagan bien
Hay gente que para lograr un 4% de grasa corporal se ha dedicado toda la vida a ello. Los atletas consagran sus días a un logro deportivo. Y si bien estos son casos de personas dedicadas a ello, el punto que queremos señalarte aquí es que cambiar tu cuerpo se trata de un proceso.
No necesitas una vida entera para ponerte en forma o perder varios kilos, o ganar músculo, pero tampoco esperes que suceda de la noche a la mañana. Al cuerpo le gustan los cambios lentos y graduales, y así es como cambia, lenta y gradualmente. A veces no podemos percibir el cambio pero si eres lo suficientemente constante y paciente eventualmente esos cambios sucenden. Todavía deberás controlar regularmente todo el proceso, pero mientras más rápido comprendas que lograrlo requerirá de un tiempo, más o menos dependiendo del objetivo y tu actual estado físico, mucho mejor para ti.
5. Tú también puedes hacerlo
En todos los ámbitos, culturistas, personas que han perdido mucho peso, deportistas y demás, en todos los ámbitos ha habido gente con historias de vida dignas de hacerse una película por todo lo que han tenido que pasar y así y todo han triunfado. Algunas personas han tenido que sobreponerse a problemas de salud serios o a algunas “discapacidades”, y han salido adelante y han logrado sus objetivos. Toda esa inspiración que busques, todas las transformaciones que veas en Youtube o las fotos de logros impresionantes, o las historias inspiradoras que leas, todo eso te dice algo: que tú también puedes lograrlo. No importa si es un kilo o treinta, tampoco si eres delgad@ como una hoja y quieres competir en culturismo. Tampoco importan las circunstancias de tu vida, ni la cantidad de tiempo que tienes disponible. Si quieres puedes, y podrás si quieres.
Una persona que no descansa simplemente no va a rendir en el entrenamiento ni tendrá salud. Difícilmente obtendrá mejoras significativas respecto al volumen muscular y la fuerza.